Algunos medicamentos pueden aumentar el riesgo de depresión

medicamento.jpg
interaccion.jpg

Un estudio, recientemente publicado, constató que más de un tercio de los adultos en los Estados Unidos toman medicamentos que pueden causar depresión y alteraciones del estado de ánimo, como efecto secundario.

Como se trata de medicamentos que están destinados a controlar afecciones crónicas, pero que no se prescriben como medicamentos destinados a trastornos de salud mental, muchos profesionales olvidan indicarle a sus pacientes que deben concurrir a una nueva consulta si sienten que, de manera injustificada, comienzan a presentar alteraciones emocionales.

También es común que una persona tome, a diario, varios medicamentos que pueden comenzar a interactuar, provocando efectos secundarios, no deseados, que ninguno de esos medicamentos provoca por sí mismo.

En general los prospectos que acompañan a los medicamentos se ocupan de informar detalladamente todos sus posibles efectos secundarios, pero lo más habitual es que el paciente no dedique tiempo a leer esos prospectos.

Para complicar aún más la situación, puede suceder que los efectos indeseados no se manifiesten al comienzo del tratamiento sino luego de un tiempo de haber incorporado el medicamento a la rutina diaria.

O bien que el paciente olvide informar al profesional qué otros medicamentos está usando, especialmente aquellos que han sido indicados por otros profesionales o los que son de venta libre, e incluso suplementos naturales, que también interactúen de manera no deseada.

A continuación, se enumeran algunos medicamentos de uso común que pueden causar depresión.

Medicamentos de uso habitual que pueden causar depresión

Corticosteroides

Los corticosteroides, como la prednisona, se usan para tratar la inflamación en afecciones como el asma, las reacciones alérgicas, las afecciones de la piel y después del trasplante de órganos para prevenir el rechazo.

Los corticosteroides imitan la hormona del estrés natural del cuerpo, el cortisol.

Pueden reducir los niveles de serotonina, una sustancia química del cerebro que está involucrada en la regulación del estado de ánimo, y también afectan la sustancia química del cerebro GABA (ácido gamma-aminobutírico), que ayuda a controlar la ansiedad y el estrés.

Las posibles consecuencias son la depresión, la disminución de la percepción del dolor y los trastornos del sueño.

Si usas corticoesteroides que te provocan sueño, consulta con tu médico e intenta tomarlos por la mañana.

También es importante conducir automotores con precaución y no utilizar herramientas que impliquen peligros de accidentes.

La consulta profesional debe ser tan rápida como sea posible, y nunca se debe suspender la toma de medicación, por cuenta propia, de manera abrupta.

Estimulantes

Los medicamentos que se usan para tratar el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y la fatiga diurna excesiva causada por la narcolepsia, aumentan los niveles de serotonina, norepinefrina y dopamina en el cuerpo.

A corto plazo, cuando el efecto del medicamento desaparece, se presentan síntomas como fatiga, ansiedad y dificultad para dormir.

Cuando se toman dosis más altas, el sistema nervioso central se inunda con dopamina y el cerebro neutraliza los receptores de dopamina para contrarrestar los abrumadores niveles de sustancias químicas cerebrales.

Con el tiempo, el cerebro ya no puede realizar su proceso normal de producción, transmisión y absorción de estos químicos cerebrales naturales, porque el sistema nervioso central espera que los medicamentos se ocupen de hacerlo.

Como resultado, los niveles desequilibrados de estas sustancias químicas cerebrales afectan el sueño, el apetito, el estado de ánimo y las emociones.

ISRS e IRSN

Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) y los inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina (IRSN) son dos tipos de medicamentos que se prescriben a menudo para tratar la depresión.

Muchas personas ignoran que todos los antidepresivos, incluidos los ISRS y los IRSN, llevan una advertencia sobre el riesgo de un aumento de los pensamientos y comportamientos suicidas en adultos jóvenes menores de veinticinco años.

Esto no significa que sea peligroso usar estos medicamentos, siempre que hayan sido recetados por el profesional de la salud especializado, pero es importante que las personas que conviven con el paciente y sus amigos estén informados de este posible efecto secundario, para cuidar adecuadamente a quienes los consumen.

Otros medicamentos que pueden causar depresión

Los siguientes medicamentos también pueden causar depresión como efecto secundario:

  • Betabloqueantes: atenolol, metoprolol, carvedilol

  • Benzodiazepinas: alprazolam, diazepam, clonazepam

  • Medicamentos para la enfermedad de Parkinson

  • Anticonceptivos hormonales

  • Anticonvulsivos

  • Inhibidores de la bomba de protones, para el reflujo

  • Estatinas y otros medicamentos para reducir el colesterol

  • Fármacos anticolinérgicos: diciclomina, benztropina, escopolamina

  • Medicamentos para controlar el dolor

Cómo saber si un medicamento está causando depresión

No hay signos claros y objetivos de depresión que se apliquen a todas las personas, ya que los síntomas pueden superponerse con los cambios de humor debido a los factores estresantes de la vida o las fluctuaciones hormonales, pero los sentimientos de tristeza, desesperanza, falta de interés, cambios en el sueño y en los niveles de energía durante el día, y los intentos de autolesión, pueden indicar una posible depresión.

De todas maneras, ante la incorporación de un medicamento es importante prestar atención a las fluctuaciones del estado de ánimo y a los patrones de conducta.

Si se producen cambios perceptibles, ya sea por el propio paciente o por el entorno social, es importante consultar con el médico tratante para que él considere si es posible que los cambios se deban a la medicación, y decida si es necesario modificar la dosis o reemplazar el medicamento.

Responder

El contenido de este campo se mantiene como privado y no se muestra públicamente.


  • Las direcciones de las páginas web y las de correo se convierten en enlaces automáticamente.
  • Allowed HTML tags: <a> <em> <strong> <cite> <code> <ul> <ol> <li> <dl> <dt> <dd>
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.

Más información sobre opciones de formato