Es probable que a menudo sientas que tu estado de ánimo necesita un pequeño envión, que te ayude a sobrellevar una noticia poco agradable o a superar un día considerado como terrible.

No te preocupes, a todos nos pasa. Y si bien hay un refrán que dice “mal de muchos, consuelo de tontos” no tienes por qué tomarlo al pie de la letra.

La mayoría de los malos estados de ánimo tienden a desaparecer en poco tiempo, y hay muchas cosas que puedes hacer para que desaparezcan sin dejar recuerdo.

Aquí van algunas ideas que, tal vez, puedan parecerte útiles.

Sal a pasear un rato

Un breve paseo por un parque cercano, puede hacer mucho para revertir tu estado de ánimo bajo.

Si en la mitad de una jornada de trabajo te sientes cansado, algo triste, o incluso somnoliento, una caminata rápida de diez minutos puede aumentar el flujo de sangre a tu cerebro, energizándolo y borrando cualquier sensación de fatiga o lentitud.

Caminar también puede ayudar a reducir el nivel de hormonas del estrés, como el cortisol, en tu cuerpo, y provocar la liberación de endorfinas, hormonas que alivian el estrés, el dolor y la falta de entusiasmo por el trabajo.

Si logras hacerlo a la luz del sol el beneficio será mayor. Y si lo haces en un entorno arbolado cubrirás una buena cuota de oxígeno que reactivará aún más tu sangre y tu cerebro.

Si no tienes un parque cercano, camina por la calle, observando a la gente que pasa y disfrutando del sonido ambiente y del sol.

Al volver a tu trabajo las sustancias químicas que mejoran tu estado de ánimo, serotonina y endorfinas, te ayudarán a sobrellevar con entusiasmo la tarea por el resto del día.

La naturaleza no sólo aumenta los sentimientos de felicidad y reduce el estrés, sino que también mejora tu capacidad de concentración, lo que podría ser clave para estar más animado cuando te resulta difícil hacer las cosas.

Si no puedes salir de tu lugar de trabajo, activa tu circulación con periodicidad, concurriendo a los escritorios de tus compañeros cuando tienes que realizar una consulta, o caminando para ir al toilette o a la máquina de café.

Muchas investigaciones sugieren que las personas que pasan tiempo al aire libre con regularidad, o miran imágenes o videos de la naturaleza cuando no pueden salir, a menudo tienen un menor riesgo de alteraciones en su salud mental.

Recurre a la aromaterapia

Tu sentido del olfato se contacta directamente con tu amígdala, una parte del cerebro que ayuda a regular las emociones.

Es por eso que los aromas que desencadenan recuerdos positivos a menudo ayudan a aliviar la tensión y la ansiedad.

La conexión entre el cerebro y el sentido del olfato también puede ayudar a explicar por qué las cosas que huelen bien te hacen sentir bien.

La aromaterapia generalmente se refiere al uso de aceites esenciales para mejorar el estado de ánimo o la salud mental, pero no necesariamente tienes que comprar aceites esenciales para obtener estos beneficios.

Es posible que tengas algunas fragancias que mejoran tu estado de ánimo en el hogar o en el trabajo.

Tómate un momento para lavarte las manos de forma conciente o frota tus brazos y hombros con tu loción corporal favorita.

También puedes colocar en tu escritorio algunas flores aromáticas que sean de tu agrado. Cada temporada tiene flores aromáticas diferentes, de manera que siempre encontrarás flores que mejoren tu vida.

Si tienes jardín en tu casa, varios breves paseos diarios te devolverán la energía necesaria para llevar adelante todas tus tareas con entusiasmo.

También el aroma del café en la cocina, o el de un pastel horneándose pueden ser un fuerte estímulo.

Las infusiones de hierbas son especialmente estimulantes o calmantes, según cuál elijas. La manzanilla y el tilo son calmantes y pueden aliviar el estrés.

Por su parte la vainilla, el café, el chocolate, la canela y los cítricos son muy estimulantes.

Por supuesto, si prefieres aromas más concentrados, opta por hornillos en los que pondrás algunas gotas de aceites esenciales. O por los muy prácticos sahumerios.

Ríete con ganas

La risa funciona tanto a nivel grupal como individual.

Reírse en grupo puede ayudar a aliviar la tensión y hacer que todos se sientan con un poco más de energía y, a menudo, un poco más unidos y distendidos.

La risa también funciona a nivel individual.

Por supuesto, forzar una risa profunda y real puede resultar un desafío cuando estas deprimido y no tienes a nadie con quien compartir un momento divertido.

Pero, gracias a los dispositivos electrónicos con los que todos contamos en la actualidad, tenemos siempre a disposición algunos videos que pueden ayudarnos a olvidar por un rato nuestros pesares.

Desde los simpáticos videos con animales, que hacen las más increíbles travesuras, hasta personas que cuentan chistes cortos que provocan la risa inmediata.

Si prefieres la lectura, elige libros de escritores que expresen sus ideas con humor. En general en la actualidad se pueden encontrar libros que abordan temas “serios” con algunos toques de humor que aligeran la carga de información pura y dura.

Y también debes tener en consideración los talleres en los que se practica la risoterapia, que están cada vez más de moda y cuyo objetivo es facilitar a los participantes el acceso a un nuevo estado de conciencia donde la risa tenga más cabida para modificar nuestro estado de ánimo, habitualmente estresado debido a las demandas sociales.

Acompaña tus tareas con música

¿Te diste cuenta de que cuando escuchas tu música favorita sientes que tu ánimo mejora?

Una melodía alegre y optimista te infunde nueva energía e incluso puede alterar el ritmo con el cual estás realizando tus tareas, especialmente si son de tipo casi automático, como la limpieza hogareña o la cocina.

La música te brinda muchos beneficios:

• Regula tu estado de ánimo y tus emociones

• Alivia el estrés y la tensión

• Reduce la ansiedad

• Promueve una función cerebral saludable, incluida una mejor recuperación de la memoria

• Mejora tu concentración

• Te ayuda a dormir mejor

En resumen, si deseas cambiar tu estado de ánimo, una lista de reproducción de canciones adecuadas a tu situación de vida te ofrece una herramienta excelente para sentirte mejor.

Contacta con tu propio cuerpo

Es completamente natural recurrir a otras personas para obtener apoyo físico y emocional cuando se trata de un estado de ánimo bajo.

Los abrazos, las caricias y otras manifestaciones de afecto pueden hacer que tu cuerpo libere oxitocina y ayudarte a sentirte reconfortado.

Cuando una madre toma en brazos a su bebé que llora, logra que inmediatamente se calme. Sentirse abrazado provoca una sensación de contención y afecto irreemplazable.

Pero, en muchos casos estamos solos, y no tenemos una persona cerca a la que podamos recurrir para que nos abrace y nos contenga.

Sin duda si te digo que una buena solución es abrazarte a ti mismo, pensarás que es una tontería. Pero puedes creer que es algo que funciona.

El tacto es una de las mejores maneras de aliviar el estrés.

También promueve la autocompasión e incluso puede ayudarnos a eliminar de manera catártica la angustia que podemos estar sintiendo en soledad.

Abrazarte, acariciar tu rostro y tu cuerpo, puede provocar una descarga de la angustia que estás sintiendo, sin tener con quién hablar o con quién desahogarte.

Comunícate con un ser querido

Ya sea que hayas superado un día largo y agotador o que tengas un evento estresante que se avecina, un mensaje rápido de amor y apoyo puede ser de gran ayuda para levantar el ánimo.

Chatear o hablar con tu mejor amigo, un familiar o tu pareja puede mejorar tu ánimo y ayudarte a deshacerte de un estado oscuro, preocupante.

Debes saber que un ser querido puede:

• Escucharte y permitir que desahogues tu conflicto

• Hacerte un comentario gracioso, que te demuestre que no pasa nada terrible

• Ofrecerte palabras de aliento

• Recordarte que siempre cuentas con su apoyo

Y también puede ayudarte a evaluar si has alcanzado un nivel de estrés o de frustración demasiado elevado, y tal vez lo que necesitas es consultar con un especialista que te ayude a recuperar una forma de vida más satisfactoria.