Beber agua, caliente o fría, mantiene tu cuerpo sano e hidratado.

Si bien hay poca investigación científica sobre los beneficios de beber agua caliente o tibia, en ayunas (por la mañana) es recomendado para desintoxicar el cuerpo y mejorar la apariencia de la piel y el cabello.

Hacerlo antes de acostarse, se considera que es una excelente manera de relajarse después de un día ajetreado, y dormir profundamente.

El Ayurveda, medicina tradicional de India, recomienda tomar agua tibia, de a sorbos, durante todo el día, por los innumerables beneficios que aporta para la salud general.

Cuando decimos agua caliente se entiende que la temperatura óptima varía entre cincuenta y setenta grados centígrados.

Las temperaturas superiores pueden ser perjudiciales para el cuerpo.

Antes de señalarte alguno de los aportes que puede brindar a tu salud el consumo de agua caliente, te comentamos que, si te resulta desagradable su consumo pero decides encararlo, puedes agregarle jugo de limón, con lo cual estarás añadiendo los beneficios de la vitamina C.

A continuación se detallan algunos de los beneficios de beber agua tibia o caliente.

Ayuda a la digestión y alivia el estreñimiento

El agua ayuda a mantener el sistema digestivo en actividad.

La deshidratación es una causa común de estreñimiento.

A medida que el agua se mueve a través del estómago y los intestinos, el cuerpo puede eliminar mejor los desechos.

Beber agua caliente es especialmente efectivo porque ayuda a disolver y disipar los alimentos que el cuerpo pudo tener dificultades para digerir.

Un estudio realizado en el año 2016 comprobó que beber agua tibia puede tener efectos favorables en los movimientos intestinales y la expulsión de gases después de una cirugía.

Mantenerse hidratado ayuda a ablandar las heces y facilita su evacuación, y el agua caliente, consumida con regularidad puede ayudar a una adecuada evacuación intestinal.

Tomar un vaso de agua tibia al levantarse es el equivalente a la ducha en el interior del cuerpo en cuanto a su poder de eliminación de toxinas.

Alivia la congestión nasal y el dolor de garganta

Una taza de agua caliente genera vapor.

Sostener una taza de agua caliente e inhalar profundamente este suave vapor puede ayudar a aflojar los senos paranasales obstruidos e incluso aliviar un dolor de cabeza sinusal.

Beber agua caliente puede ayudar a calentar la mucosa de la garganta, disolver la mucosidad acumulada y aliviar el dolor de garganta, la carraspera y la disfonía.

Alivia los síntomas de la acalasia

La acalasia es una afección del esófago que dificulta la movilidad de los alimentos hacia el estómago.

Las personas con acalasia tienen problemas para tragar.

Pueden sentir que los alimentos quedan atascados en el esófago en lugar de pasar al estómago. Esto se llama disfagia.

Un estudio del año 2012 encontró que beber agua tibia puede ayudar a las personas con acalasia a digerir más cómodamente.

Puede colaborar con un mejor funcionamiento del sistema nervioso central

No obtener suficiente agua tiene efectos negativos en el funcionamiento del sistema nervioso y afecta el estado de ánimo y el buen funcionamiento del cerebro, que es uno de los órganos que más agua necesita.

En invierno a muchas personas les cuesta beber la cantidad necesaria diaria porque pueden sentir menos sed o hacer menos actividad física.

Tomar agua tibia o alguna infusión puede contribuir al logro de una hidratación adecuada.

Reduce los escalofríos

Si bien la respuesta natural del cuerpo en condiciones de frío es temblar, beber líquidos tibios puede ayudar a reducir los escalofríos.

Un experimento demostró que un grupo de personas sometidas a temperaturas muy bajas, cuando bebían agua caliente necesitaban menor actividad para mantener la temperatura corporal.

Esto puede ser muy útil para las personas que trabajan o hacen ejercicio en condiciones de frío extremo.

Mejora la circulación

Tomar un baño tibio ayuda a que las arterias y venas se expandan y transporten la sangre de manera más efectiva por todo el cuerpo.

Beber agua caliente puede tener un efecto similar.

Beneficia al sistema circulatorio manteniendo tu presión sanguínea y funcionando como relajante, lo que también facilita el sueño.

Colabora con la pérdida de peso

Tomar agua caliente sin ingesta previa de alimentos aumenta la temperatura corporal y pone en funcionamiento el metabolismo de forma inmediata.

Un estudio publicado en 2003 comprobó que tomar medio litro de agua tibia antes de desayunar incrementaba el metabolismo en un treinta por ciento.

Eso a su vez acelera la quema de grasas, lo que ayuda a perder peso.

La bebida puede ser más efectiva si se le añade jugo de limón o vinagre de manzana.

También provoca sensación de plenitud y ayuda a absorber nutrientes, por lo que estos se aprovechan mucho más sin tener que ingerir más calorías, y se evita picar entre horas.