Si sufres artritis consulta al médico antes de tomar un antiinflamatorio
Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) reducen la fiebre, el dolor y la inflamación, y pueden ayudar a aliviar los síntomas leves de la artritis. Pero no son opciones de tratamiento adecuadas para todos los tipos de artritis.
El tratamiento para la artritis depende de la causa subyacente. En algunos casos, se necesita fisioterapia y cirugía.
Sin embargo una opción común, que se usa principalmente para aliviar el dolor y la rigidez leves, son los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos.
Como algunos AINE son de venta libre, muchas personas recurren a ellos sin realizar consultas con un profesional de la salud.
Tipos de artritis
La artritis es un término que comprende un gran número de afecciones que provocan inflamación en una o más articulaciones.
Los tipos más conocidos incluyen:
osteoartritis
artritis reumatoide
artritis psoriásica
gota
Todas estas condiciones pueden provocar inflamación de las articulaciones, dolor y rigidez articular.
No todos los AINE son iguales
Todos los AINE funcionan bloqueando una enzima llamada ciclooxigenasa, que contribuye a la respuesta inflamatoria.
Al bloquearla detienen los efectos dolorosos de la inflamación antes de que aparezcan.
Algunos AINE son de venta libre. Es el caso del ibuprofeno y el naproxeno. Pero la mayoría solamente está disponible con receta médica, aunque en muchos casos pueden adquirirse también sin receta.
Los que necesitan receta médica son:
diclofenaco
meloxicam
piroxicam
celecoxib
nabumetona
sulindaco
Pero, pese a su efecto común, no todos son iguales, porque afectan a quienes los toman de diversas maneras.
Para tomar un AINE con seguridad y obtener el mayor beneficio es necesario consultar a un médico porque cada historial requiere un tratamiento específico.
Además, es riesgoso tomar cualquier AINE si se están tomando otros medicamentos para patologías concomitantes.
También es importante saber qué dosis son necesarias para cada tratamiento y por cuánto tiempo pueden consumirse, porque no se recomiendan en un tratamiento prolongado debido a sus efectos secundarios.
Efectos secundarios de los AINE
Los AINE pueden ser efectivos para controlar el dolor de la artritis, pero también pueden causar efectos secundarios, especialmente si se los toma durante mucho tiempo.
Los más comunes incluyen dolor de estómago y úlceras. Otros efectos secundarios menos comunes incluyen:
mayor riesgo de accidente cerebrovascular o ataque al corazón
dolores de cabeza
mareo
zumbido en los oídos
hinchazón en las piernas
malestar estomacal
Los AINE también pueden dañar el hígado y los riñones, especialmente consumidos en dosis altas.
También es posible una reacción alérgica a estos medicamentos, pero no es común.
El celecoxib es considerado el AINE más seguro para tratar el dolor de artritis a largo plazo en relación con el daño al aparato digestivo, que puede llegar hasta la producción de úlceras.
Pero también celecoxib podría aumentar el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.
Los riesgos de efectos secundarios pueden disminuir si los AINE son tomados con comida, en tabletas recubiertas, y por supuesto durante períodos breves y en las dosis más bajas.
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