Crisis de ansiedad: cómo reconocer posibles disparadores

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La ansiedad es una condición de salud mental que puede causar desde sentimientos de preocupación, miedo o tensión, hasta ataques de pánico y síntomas físicos como dolor en el pecho, dificultad para respirar, mareos y palpitaciones.

Es un trastorno que afecta a millones de personas en el mundo, y las condiciones de vida actuales hacen que esté en constante aumento.

Un estado de ansiedad puede tener muchas causas que lo provoquen y es importante que cada persona que padezca crisis de ansiedad pueda tener conciencia de cuál es el disparador específico para ella.

Si logras identificar y comprender cuáles son los factores disparadores de ansiedad en tu vida, puedes trabajar para evitarlos y sobrellevarlos.

Puedes aprender estrategias de afrontamiento específicas para manejarlos cuando se presenten.

Si sufres trastorno de ansiedad a continuación enumeramos algunos de los disparadores más comunes. Tal vez alguno te pueda servir para aprender a reconocer y controlar una posible crisis.

Disparadores de ansiedad

Preocupaciones financieras

Las preocupaciones vinculadas con deudas, merma en futuros ingresos o problemas laborales pueden desencadenar ansiedad.

Si te resulta difícil establecer un presupuesto fijo que considere un gasto mensual proporcional a tu ingreso, o si no sabes cómo proteger tus ahorros ante posibles pérdidas provocadas por una situación económica general complicada, tal vez puedas solicitar la ayuda de un asesor financiero, o consultar con amigos con experiencia en el manejo de sus finanzas.

Pensamientos negativos

Tener pensamientos negativos es algo común; de hecho, nos pasa a la mayoría de las personas.

El problema surge cuando estos pensamientos negativos aumentan la ansiedad y sientes que no eres capaz de alejarte de ellos y mantener una postura objetiva.

Los pensamientos negativos provocan que el organismo segregue una serie de sustancias químicas que pueden provocar reacciones desagradables que te lleven a tratarte de manera desconsiderada para contigo mismo.

Problemas de salud

Si te diagnostican una patología que puede resultarte de difícil comprensión o bien que implica un riesgo a futuro, es importante que le hagas al profesional tratante todas las preguntas que te ayuden a esclarecer la verdadera dimensión del riesgo.

Ante una situación de este tipo es habitual que el paciente prefiera no comprender exactamente cuál es el riesgo que enfrenta. Pero esa ignorancia solamente sirve para que la ansiedad se incremente.

Estás en tu derecho de saber qué procedimientos pueden realizarse, con qué posibles resultados y cuál es tu esperanza de vida.

En muchos casos los médicos se centran solamente en el aspecto sanitario y olvidan que cada persona reacciona de manera diferente ante un diagnóstico, pudiendo exagerar los riesgos o bien negarlos, como un mecanismo de defensa.

Si tienes dudas, no vaciles en consultar a otro profesional que atienda todos tus requerimientos y despeje esas dudas.

Medicamentos

Algunos medicamentos recetados pueden desencadenar síntomas de ansiedad en algunos pacientes, aunque no en todos. Y es probable que el profesional que los receta olvide advertirte sobre esos posibles riesgos.

Si algún medicamento recetado altera tu habitual ritmo de vida o tu estado emocional no vaciles en volver a consultar.

En la actualidad muchas personas consumen también medicamentos de venta libre cuyos ingredientes activos pueden provocar síntomas adicionales de ansiedad.

Entre los medicamentos que pueden desencadenar ansiedad se incluyen los anticonceptivos orales, los medicamentos antitusígenos y los medicamentos para adelgazar.

Cafeína

Muchas personas disfrutan de una taza de café por la mañana porque consideran que los ayuda a comenzar la jornada con mayor energía y más alertas, pero para algunas personas, especialmente las que son naturalmente ansiosas, puede producir un efecto negativo.

Según algunos estudios confiables, beber cinco tazas de café a diario aumenta la ansiedad e induce ataques de pánico en personas predispuestas a esa patología.

Lo mismo sucede con las bebidas energizantes, tan de moda, especialmente entre quienes practican algunos deportes o el fitness. Y también entre los adolescentes que suelen combinarlas con bebidas alcohólicas.

Si te gusta el café trata de no excederte en la cantidad de cafeína que consumes durante el día y podrás disfrutar sanamente de tu bebida predilecta.

Discusiones y relaciones conflictivas

Si las discusiones, los desacuerdos y las situaciones familiares o sociales conflictivas te producen ansiedad, deberías intentar aprender estrategias que te permitan resolverlas sin padecerlas.

Un terapeuta puede ayudarte a reconocer y manejar los sentimientos que provocan esos conflictos.

Sentirse ansioso sin motivo

A veces puedes sentirte ansioso sin razón aparente, pero es necesario tener en cuenta que en casi todos los casos existe una causa subyacente, aunque el desencadenante puede estar más allá de tu conciencia.

Si constantemente te sientes ansioso sin saber por qué, es probable que padezcas un trastorno de ansiedad generalizada, lo cual amerita el tratamiento médico.

Además de los desencadenantes enumerados anteriormente, las siguientes son algunas de las posibles razones por las que puedes sentirte ansioso sin motivo aparente.

Los trastornos de ansiedad pueden ser hereditarios. Si alguien en tu familia tiene un trastorno de ansiedad, corres un mayor riesgo de tener uno.

Algunas condiciones médicas, como la artritis, el asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y la diabetes, pueden estar asociadas con la ansiedad.

Si te sientes ansioso y no sabes por qué, pero la ansiedad está dificultando tu vida cotidiana, hablar con un terapeuta puede ayudarte a esclarecer el problema y a vivir mejor.

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