Aprende a evitar el consumo de químicos dañinos para tu salud

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La creciente evidencia del peligro que representa el uso de las sustancias perfluoroalquiladas, conocidas por la sigla PFAS, un grupo de aproximadamente cinco mil productos químicos que se fabrican por sus propiedades resistentes al aceite y al agua, ha determinado la promoción de nuevos estándares para el agua potable segura y la atención médica.

La alarma sobre los impactos en la salud de estos productos químicos ha provocado una reciente oleada de acciones por parte de los funcionarios reguladores y de salud pública de los Estados Unidos, quienes advirtieron. que las PFAS representan un mayor riesgo para la salud de lo que se pensaba.

En el mes de junio, la Agencia de Protección Ambiental redujo drásticamente los niveles seguros recomendados de productos químicos en el agua potable.

Las PFAS, que en un tiempo prometieron hacernos la vida más fácil y disfrutable, ahora nos condenan a convivir con condiciones que van desde niveles de lípidos en sangre no saludables, hasta complicaciones del embarazo, bajo peso de los niños al nacer, obesidad infantil, hipotiroidismo en mujeres y cáncer de riñón y testicular en hombres.

Estas sustancias químicas son conocidas también como productos químicos para siempre, por su capacidad de perdurar en el medio ambiente.

Las PFAS se encuentran en muchos productos.

Ente ellos, pinturas, espuma contra incendios, protectores solares, maquillajes, hilo dental, textiles que rechazan las manchas, utensilios de cocina de teflón, césped artificial, empaques de comida rápida, y muchos otros.

Impactos en la salud

Un panel de académicos encontró evidencia suficiente de que las PFAS incrementan el riesgo de las siguientes dolencias.

  • Mala respuesta de anticuerpos a la vacunación, en adultos y en niños

  • Niveles anormalmente altos de colesterol, en adultos y en niños

  • Disminución del crecimiento infantil y fetal

  • Cáncer de riñón, en adultos

  • Cáncer de mama

  • Hipertensión inducida por el embarazo

  • Cáncer testicular, en adultos´

  • Trastornos de la tiroides

  • Colitis ulcerosa, en adultos

Evaluación del riesgo

El informe de ese panel de académicos también se centró en la posibilidad de reducir el número de víctimas proporcionando pautas de prueba a los médicos para detectar niveles altos de PFAS en el cuerpo y tratar de reducir la exposición.

Señalaron que en personas con concentraciones en sangre de entre 2 y 20 ng/ml, los médicos deben evaluar condiciones como niveles no saludables de grasa en la sangre, que pueden provocar problemas cardíacos.

Esa evaluación es especialmente importante para las personas más vulnerables a los efectos de la exposición a las PFAS, como los niños, las personas embarazadas y las inmunodeprimidas.

Para quienes presentan niveles superiores a 20 ng/ml, el informe recomienda exámenes de detección de rutina para algunos tipos de cáncer, problemas de tiroides y colitis ulcerosa.

Cómo deberían actuar los gobiernos

La creciente preocupación por los efectos de las PFAS en la salud y el medio ambiente está impulsando la adopción de medidas también a nivel estatal.

El gobierno de los Estados Unidos planteó poner límites a las descargas de PFAS en el agua por parte de los fabricantes de químicos, pinturas, papel, plasticos, componentes eléctricos, textiles, marroquinería, empresas de acabado de metales y de galvanoplastia.

También se ha planteado la prohibición o restricción del uso de PFAS en los productos de cuidado personal, maquillaje, ropa y envases de alimentos.

La Unión Europea está considerando la prohibición del uso de miles de químicos PFAS, excepto cuando su uso sea considerado esencial.

Cómo puedes evitar estos contaminantes

Evitar el contacto con los PFAS es prácticamente imposible.

Pero con pequeños gestos puedes proteger tu salud y la de tu familia.

  • Evita el uso de textiles para el hogar (alfombras, cortinas, ropa de cama y de mesa) y de prendas de vestir confeccionadas con telas que repelen las manchas y resistentes al agua.

  • Evita los alimentos envasados en bolsas o recipientes antigrasa. Si compras comidas preparadas, lleva tu envase de vidrio.

  • Considera que no todos los envases compostables están libres de PFAS; elige los envases certificados.

  • Cocina con ollas y sartenes de acero inoxidable, hierro fundido, vidrio o cerámica en lugar de las opciones antiadherentes.

  • Evita los productos de cuidado personal y de maquillaje que incluyan en sus ingredientes "perfluor", "polifluor", "PTFE" o teflón.

  • Si el agua potable de tu casa no ha sido testeada para PFAS, un filtro de agua podría ser una buena inversión.

Pero no todos los filtros tienen la misma efectividad. Un estudio realizado en el año 2020, en la Universidad de Duke, encontró que los filtros de ósmosis invertida y los filtros de dos niveles son mejores para eliminar PFAS que los de carbón activado.

  • Si bebes agua embotellada, compra agua con la etiqueta "purificada", en lugar de agua de manantial.

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